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... Fui condenado a nacer entre los lirios de Abril,
más allá de las volutas de agua de mar.
Una vida en la oscuridad fui obligado a llevar
ciego de luz, mudo de música celestial.
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... Un abrigo de hojas la Naturaleza me dio
y un refugio de rocas de sal;
la sabiduría de los pájaros y la persistencia del viento,
y una paz y eterna serenidad.
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... Se esforzó por rendirme un homenaje
y a mi marcha me dedicó una canción,
un recuerdo en la memoria del árbol
y una cascada que llora por mí.
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